La escena se abre con una joven adolescente negra, con su gran culo en plena exhibición, mientras espera ansiosamente la llegada de su sacerdote.Cuando él entra en la habitación, ella se agacha nerviosa para mostrarle sus amplios atributos.El sacerdote no pierde tiempo en ponerse manos a la obra, ordenando a la chica que se arrodille y le haga una mamada.Obliga ansiosa tomando ansiosdamente su gran polla profundamente en su boca.El cura luego dirige su atención a otra chica, que también está ansiosa por complacer.Le dice que se ponga a cuatro patas y que abra sus piernas de par en par, dejando al descubierto su pequeño y apretado ano.Se agacha ansiosamente, mostrando su culito apretado y su coño afeitado.