El video presenta a una mujer sumisa llamada Elise Graves, atada y suspendida en bondage por su pareja dominante. Ella está gritando de dolor mientras soporta la brutal dominación de su amo, quien usa su cuerpo para su placer. Sus lágrimas son evidentes mientras gime de angustia y suplica por más. La escena comienza con Elise acostada en una cama, usando solo una falda corta y medias. Su amo entra en la habitación y comienza a besarla, antes de pasar a otra mujer. Luego, usa varios juguetes e instrumentos para penetrarla, haciéndola llorar más fuerte y más fuerte. Finalmente, la libera de la bondage y le permite ponerse de pie, mientras aún lleva su ropa. La cámara captura cada momento de su intenso encuentro, incluida la forma en que lucha por encajar en su entorno y los sonidos de ser asfixiada o azotada. Este video no es solo para los débiles de corazón y se recomienda para aquellos hombres y mujeres BDSM extremos.