Una pareja de amigos íntimos estaban jugando a un juego de dardos, y uno de ellos me atrevió a chupársela a su amigo artista.Al ser el tipo aventurero que soy, asumí el desafío y me dirigí a su casa.Al llegar, fui recibida por mis amigos gordos, pero seductores amigos, que estaban más que ansiosos por mostrarme lo talentoso que estaba con sus manos.Comencé dándole una mamada con garganta profunda, tras lo cual correspondió tomando mi polla en su boca.El juego estaba encendido, y a medida que continuaba complaciéndole, él a su vez me complació de vuelta, culminando en una sesión de follada salvaje.La vista de su gran y gorda polla follando a pelo conmigo era un espectáculo para contemplar, y la sensación que traía no era nada menos que soplara la mente.Con su gran polla, pudo estirar mi agujero de par en par, dejándome suplicando por más.Esto fue solo un encuentro al azar; fue un juego que todos disfrutamos jugando.